Hemos sido grandes fanáticos de los vinos de Frank Cornelissen desde hace muchos años, y estamos encantados de que estén disponibles en México. La granja y los viñedos de Frank se encuentran en Sicilia, en el valle norte del Monte Etna, un volcán activo. El Monte Etna ha ganado un gran éxito de crítica en los últimos años y está considerado como una de las regiones con mayor potencial de calidad en Italia. El valle norte se considera la zona principal del Etna para los vinos tintos de un solo viñedo (contrada), similar a lo que se encuentra en las denominaciones de Borgoña o la región de Barolo de Piemonte. La finca consta de 24 hectáreas de viñedos, de los cuales 13 hectáreas están plantadas con viñedos muy viejos (algunos en los alrededores de 100 años de antigüedad). Las viñas viejas están formadas en el clásico sistema de albarello, y las viñas están salpicadas de árboles frutales y olivos. Abejas, verduras y uvas por igual abundan en estos micro ecosistemas complejos. El toque ligero de Frank en los viñedos desmiente su firme convicción de que un viticultor no debería tratar de cambiar o dominar la naturaleza, sino trabajar con ella, escucharla y someterse a su sabiduría. En sus propias palabras: “Nuestra filosofía de cultivo se basa en nuestra aceptación del hecho de que el hombre nunca podrá comprender la complejidad y las interacciones de la naturaleza. Por lo tanto, optamos por concentrarnos en observar y aprender los movimientos de la Madre Tierra en sus diversas actividades energéticas y sus pasos cósmicos y preferimos seguir sus indicaciones sobre qué hacer, en lugar de decidirnos e imponernos.”