Aunque Gianluca Salamon y su padre Francesco son agricultores que llevan décadas cosechando principalmente verduras, siempre han contado con un pequeño viñedo en su propiedad en Santa Lucia di Piave, en las afueras de Treviso. Por muchos años produjeron vinos tintos regionales de mediana calidad hasta que decidieron cambiar de giro y empezaron a producir Glera, una uva conocida solo regionalmente en ese entonces. Hoy en día gracias a la fama de Prosecco, esa decisión fructífera los ha hecho alcanzar rincones especiales del mundo.

Terriero, terrateniente en italiano, es el Prosecco producido con las uvas de la familia Salamon. Terriero está vinificado de acuerdo con las tradiciones de la denominación de Valdobbiadene. Consistente con las prácticas de vinificación de la región, se mantiene en tanques pequeños y se embotella sólo sobre pedido de la familia Salamon.